Hola, hoy os traigo algo que es muy especial para mí, es un peluche, un muñequito, un conejito, que se llama Cocó.
¿por qué es tan especial? porque es para mi hija, ella tiene un peluche, un conejito, que lo usa desde que nació, duerme con él, juega con él, viajamos con él, lo achucha cuando está malita, llora, está triste.... ha sido su compañero inseparable desde hace más de 4 años. Y claro, tanta vida, le ha pasado factura al peluche, el relleno se está perdiendo, el pelito se le está yendo y la tela ya clarea para romperse...es tal, que llevo semanas sin lavarlo para que no se le rompa, jejeje pero claro es tan especial que no quiere separase de él.
Pues su mami, o sea yo, como hacemos lo que sea por nuestros hijos, le dije que le iba a hacer uno igual, o lo más parecido posible.... porque aunque hemos buscado uno igual, ha sido imposible de encontrar, por lo que tocaba hacerlo.
Lo cual ha sido un reto para mí, ya que he tenido que hacer los patrones fijándome en cómo es el que tiene, han sido varios días de dibujar, recortar, probar si casan las partes, rehacer..... y cuando ya pensaba que casaba todo bien, pasarlo a tela y hacer una prueba, y por fín, dí con las medidas y el patrón correcto, jejeje, ¡¡¡madre mía lo que me ha costado!!!! porque no es lo mismo tener un patrón, cortar y coser, jejejjee
Y este es el resultado
No es cien por cien idéntico al suyo, pero es lo más fiel que lo he podido hacer, es blanquito, suave, blandito.... y¡¡¡ le ha encantado!!! aunque eso sí, estamos unos días, con los dos, porque dejar al otro en la estantería todavía nos cuesta, pero ya se va haciendo con él, y ya juega y duerme con él.
Y si el original se llama Cocó, este es Cocó 2, jajaja o Cococito, como a veces le llama ;)
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